Este tipo de tratamiento no quirúrgico logra mejorar notablemente la textura y aspecto de la piel de la cara, dejando la misma totalmente rejuvenecida.

Esto se logra a traves del tratamiento de la piel con un laser especialmente diseñado para estimular la regeneracion de las distintas capas de la piel.

Se realiza en 5 o 6 sesiones que duran alrededor de 20 a 30 minutos separadas por 3 o 4 semanas.

No es un proceso doloroso, provoca un enrojecimiento temporal de la zona tratada, y puede realizarse en cara, cuello y escote.